Como pez fuera del agua
Editorial: @editorialastronave
Formato: Pasta dura
Páginas: 32
“A veces es difícil ser valiente. A veces, simplemente, no estás preparado… hasta que, un día, lo estás”.
Validar las emociones de nuestros hijos y acompañarlos mientras transitan en ellas, a veces resulta cansado, frustrante y complicado.
Sin embargo, es importante respetar sus tiempos y recordar que cada uno reaccionamos de manera distinta a los estímulos que se nos presentan.
Asumir entonces que nuestros hijos son una extensión de nuestra vida y de nuestra propia personalidad (llegando incluso a forzarlos para conseguirlo), es muchas veces contraproducente y dañino para su seguridad y autoestima. Evita hacerlo, pues aún y cuando nuestras intenciones sean las mejores y queramos impulsarlos o ayudarlos a superar las adversidades que les toquen vivir, siempre será más útil recordar que el proceso de cada uno, es justo así: PERSONAL y ÚNICO.
Así que por más que nos cueste mucho resistir la tentación de intervenir o de proteger(los), hagamos un esfuerzo diario por SÓLO acompañar. En verdad es todo lo que necesitan. Confía en ellos, y confía en ti.